Gerenciando el Coronavirus: Reflexiones pertinentes.
Por Iván Arrieta G. – Orgulloso Representante de la Marca Perú en Management Estratégico – BSC Focusplus®
Hace una semana, a puertas de empezar esta última etapa de la cuarentena, escribí un post sobre la importancia de tener el Norte claro en el manejo de esta enorme crisis sanitaria.
En ella invitaba a la reflexión sobre si el número de pruebas realizadas, constantemente mencionado en medios, era el indicador más importante en la gestión de la pandemia
La conclusión era que No, que era un driver importante a tomar en cuenta pero que era uno más de varios otros que el gobierno debía gestionar óptimamente para lograr un objetivo y un indicador superior:
Objetivo: Minimizar el impacto en vidas del coronavirus.
Indicador: Número de fallecidos por millón.
Sugeríamos llevar el indicador a una escala de un millón para poder compararlo con otras realidades.
Esta conclusión – decíamos – se evidenciaba con cifras de 6 países escogidos de la región (Brasil, México, Chile, Colombia, Ecuador y Perú) y que nos situaba en el el segundo lugar en número de pruebas pero penúltimos en número de fallecidos, llevados ambos a escala por millón de habitantes.
Una semana después escribo estas líneas para reflexionar cómo nos fue:
En 7 días hemos pasado del segundo al primer lugar en número de pruebas pero seguimos penúltimos en número de infectados y también penúltimos en el número de fallecidos. Los tres indicadores llevados a escala por millón de habitantes.
Es decir, una vez más la realidad evidencia que no alcanza con hacer muchas pruebas.
Hay que elevar el nivel de gestión estratégico de la pandemia.
Como entramos al terreno de la gestión estratégica me permito invitar a hacer algunas reflexiones:
1. Cuando se tiene muchos indicadores (y eso pasa en las entidades también) se puede perder la brújula y no tener claro cuál es el indicador que se debe tomar como supremo, tomando muchas veces erradamente otro indicador que resulta ser sólo uno de los drivers.
2. Cuando se tiene muchos indicadores (y eso pasa en las entidades también) se puede monitorear varios indicadores como si todos tuvieran el mismo peso, por lo que si tiene algún indicador en verde y otros en rojo se podría pensar que estamos en ámbar. En realidad no es así. Hay que pensar bien y escoger cuál es el indicador a seguir y si ése está en rojo, la gestión está en rojo.
3. Cuando ya se tiene claro el Qué, es decir, cuando se ha identificado el verdadero indicador a seguir como fin supremo, se debe diseñar y monitorear el Cómo lo voy a lograr: Una Hoja de Ruta Estratégica a seguir.
El 30 de Marzo publiqué una Hoja de Ruta Estratégica que aún considero válida para entender la idea de la misma.
4. Un mes después, la situación sanitaria del país ahora se ha complicado, y así como en una entidad debemos identificar las diferentes unidades estratégicas para aplicar recetas estratégicas diferenciadas, ahora debemos identificar cuántos focos de epidemia diferenciados tenemos para aplicar una estrategia distinta en cada caso. Se tiene que entender que ahora estamos jugando varias partidas de ajedrez en paralelo y tenemos que tener la jugada ganadora en cada caso.
Este post no intenta transmitir conocimiento de contenido (para eso están los epidemiólogos, infectólogos, sociólogos, etc).
Intenta hacer reflexionar sobre algunos aspectos fundamentales del management estratégico con el único fin tratar de aportar al éxito justamente de la gestión gubernamental de nuestro país contra este terrible enemigo invisible.
